Esquela de Luis Vallejo Real de Asúa

Muy temprano por la mañana he recibido un interesante correo electrónico de un fantástico colaborador que siempre está al pie del cañón, Tomás Fernández Hernando, que me comenta que el periódico Deia le ha publicado hoy una pequeña carta al Director. Ahí va el texto:

EL ARQUITECTO LUIS VALLEJO

Hoy se cumplen 50 años del fallecimiento del arquitecto bilbaíno Luis Vallejo Real de Asúa, que estudió la carrera en Madrid y se tituló en 1927. Fue un gran teórico de la arquitectura, uno de los pioneros del racionalismo vasco y de los pocos miembros del GATEPAC en Euskadi.

Viene a cuento recordar la efeméride en DEIA porque Vallejo fue quien proyectó en 1932 las escuelas de Errotatxueta para la Federación de Escuelas Vascas-Eusko-lkastola-Batza, que estuvieron situadas en la Gran Vía, en lo que son los actuales números 64 a 70. Las instalaciones constaban de dos pabellones de paredes y suelo de madera con tejado de uralita. Los promotores fueron José de Vilallonga y Eli Gallastegi, entre otros abertzales.  

La obra construida de Vallejo fue muy escasa ya que abandonó el ejercicio de la profesión para dedicarse a los negocios en fechas previas a la guerra civil. No obstante en Santurtzi tenemos el privilegio de conservar su única obra: se trata de la conocida popularmente como “la casa del cura del Patronato”, cuyos planos fueron firmados por Vallejo en 1927 y que probablemente fue su primer proyecto. La casa, perfectamente conservada, hoy en día acoge aulas de la EPA. 

Me comenta Tomás en su email que le ha venido de perlas la efeméride para aflorar la información sobre el arquitecto autor del proyecto de la casita del cura, porque recordaba que yo estaba interesado en el edificio y en su arquitecto, que hasta ahora era desconocido para mí. Me comenta que Luis Vallejo se tituló en marzo de 1927 y firmó el proyecto en el mes de julio de ese mismo año, que es probable que fuese la primera obra de una carrera casi sin proyectos construidos, y menos aún conservados. Añade que era familia de Aurora Vildósola y que de ahí le vino el encargo.

Con estos datos me he puesto manos a la obra. He consultado los apuntes que tenía recopilados, he investigado un poco (la enciclopedia Auñamendi y Bilbaopedia son siempre buenos referentes) y he descubierto lo siguiente:

Luis Vallejo Real de Asúa [o Azua] nació en Bilbao el 18 de febrero de 1901 y muere tal día como hoy en Getxo en 1964. Sus padres eran el matrimonio formado por Emilio Vallejo Arana (nacido en Portugalete en 1867) y Sofía Real de Asúa Arano, presidente de Seguros Aurora e hija del fundador de la Compañía Vitivinícola del Norte de España (CVNE), respectivamente. A través de su esposa estaba emparentado con los Chalbaud, Amann e Ybarra. Se trata, por tanto, de un ejemplo de la conocida endogamia de Neguri, donde era habitual que las familias emparentasen a sus hijos entre sí.

Sus abuelos paternos fueron Juan Vallejo Brizuela y Prisca Concepción Arana Mendiolea (hermana del esposo de Aurora Vildósola, Eulalio Luis Arana Mendiolea).

Personajes - Luis Vallejo Real de Asúa (arquitecto) (foto)

Fue uno de los tres grandes, junto con el donostiarra Aizpurua y el tolosarra Labayen, de la moderna arquitectura racionalista vasca. Estudió en la Escuela de Madrid regresando en 1927. Inició su carrera profesional en el gabinete de Manuel María Smith y en la Asociación de Artistas Vascos, en cuya Exposición de 1928 tomó parte destacada. Fue, junto con Aizpurua, el único arquitecto del Estado que asistió al II CIAM de Basilea en 1929. Ese año tomó parte en el Concurso Nacional de Vivienda mínima dentro de las más modernas corrientes internacionales. Al siguiente diseñó una residencia de médicos internos en el Hospital de Bilbao, tomó parte en la Exposición de Arquitectura y Pintura Modernas de Donostia y acudió, con Aizpurua, al III Congreso de la CIRPAG de Bruselas. En 1931 elaboró un proyecto para la Sociedad Santa Lucía. En 1932 y, antes de dejar la profesión, edificó las Escuelas de Errotatxueta y consiguió el 2º Premio del concurso de viviendas de Solokoetxe. Miembro importante del GATEPAC, sufrió encarcelamiento tras la guerra.

Para los que no lo sepan, GATEPAC es el acrónimo del Grupo de Arquitectos y Técnicos Españoles para la Arquitectura Contemporánea, fundado el 25 y el 26 de septiembre de 1930 en el Gran Hotel de Zaragoza y disuelto tras el estallido de la Guerra Civil en 1936, que, entre otras cosas, trajo consigo el exilio o prisión de varios de sus miembros.

Como asociación que se nutrió de jóvenes arquitectos titulados entre 1920 y 1930 y algunos estudiantes y colaboradores que se titularon más tarde, el GATEPAC consistía en tres grupos regionales activos en Madrid (Grupo Centro), en Barcelona (Grupo Este) y en San Sebastián y Bilbao (Grupo Norte o Grupo Vasco), a los que hay que sumar los arquitectos Regino Ojeda y José Borobio Ojeda que trabajaron en Zaragoza, pero que compartieron el espíritu de la asociación. El Grupo Norte, relacionado con San Sebastián y Bilbao pero muy poco activo, lo formaron, entre otros, José Manuel Aizpurúa Azquetas, Joaquín Labayen Toledo y Luis Vallejo Real de Asúa como miembros fundadores.

Y en cuanto a la relación de Luis Vallejo con Santurtzi, que ha sido el motivo del email de Tomás Fernández y de esta entrada, ya hemos citado el que probablemente fue su primer proyecto, la denominada casa del cura.

Casa del Cura (rectificada)

Ubicado en el número 40 de la calle Santa Eulalia, se trata de un edificio incluido en el Catálogo Municipal que cuenta con planta regular, casi cuadrada, de 237 m2 de superficie útil distribuidos en un semisótano, planta baja y primera.

Casa del Cura-1

Así pues, ya conocemos su cronología (proyecto de 1927); su autor, Luis Vallejo Real de Asúa; y su promotor, su tía abuela política, Aurora Vildósola de los Campos. En cuanto al estilo arquitectónico, no se trata de un ejemplo canónico de arquitectura racionalista, seguramente por su temprana cronología y su finalidad, servir de residencia a un sacerdote adscrito al Patronato, el cual ha celebrado este año su centenario.

Reitero mi agradecimiento a Tomás Fernández Hernando y a todos los que colaboráis proporcionándome información y/o imágenes para las diversas entradas del blog.